A lo largo de este post repasaremos la importancia del coeficiente de fricción para determinar el par de apriete óptimo de los tornillos. También veremos cómo la aplicación de sellantes y lubricantes específicos puede ayudarnos a asegurar el coeficiente de fricción adecuado para un buen uso y mantenimiento de los tornillos de gran calidad.

Tener en cuenta las propiedades mecánicas de tus fijaciones te permitirá aprovechar al máximo sus bondades. Además, evitarás roturas y el gasto asociado al reemplazo de los tornillos perdidos. Te animamos a seguir leyendo y a saber con más detalle a qué nos referimos.

La relación entre par de apriete y coeficiente de fricción

El par de apriete hace referencia a la fuerza exacta que debemos aplicar cuando apretamos el tornillo con su tuerca o un agujero roscado, por ejemplo. Es una medida exacta que debemos respetar para no superar el límite elástico de la pieza y que esta no se deteriore por un exceso de presión.

El par de apriete de un tornillo se determina a partir de los siguientes factores:  su métrica, el paso, la calidad del acero (4.6 / 5.8 / 6.8, etc.) y el coeficiente de fricción. Este último es determinante, sobre todo, en tornillos de alta calidad.

El coeficiente de fricción es la resistencia que el tornillo presenta al ser roscado en su  alojamiento (tuerca o agujero roscado). Conocer el valor de este coeficiente permite al operario ser más preciso en el apriete aplicado. 

Como puedes ver en la siguiente tabla, el coeficiente de fricción hace variar, y mucho, el apriete en un mismo tornillo de una misma calidad; por tanto, tal y como hemos adelantado, considerar mal este factor podría comportar roturas.

También debemos ser muy conscientes de que este coeficiente está sujeto a valores de dispersión de los que también debemos ocuparnos. Aunque las herramientas de apriete pueden ayudarnos con esto, en ocasiones, la variación en el apriete aplicado puede ser muy amplia. Esta está sujeta a cuestiones cuya variabilidad es difícil de controlar, tales como la posición del operario o la forma en la que este sujete la herramienta. A este respecto, desde Tormetal aconsejamos a nuestros clientes que, además del par de apriete, también tengan en cuenta el ángulo de par. La consideración de este valor es muy interesante, pues puede ayudarnos a conseguir resultados más precisos. 

Los tratamientos de superficies como aliados

Para controlar estas desviaciones en el coeficiente de fricción recomendamos:

  1. Conocer y respetar las indicaciones de par de apriete del fabricante de tornillería.
  2. Utilizar recubrimientos de fijaciones para controlar el coeficiente de fricción.

 

Desde Tormetal, a través de nuestros distribuidores, podemos aplicar sellantes y lubricantes sobre el tratamiento superficial de nuestra tornillería. De este modo, regulamos y garantizamos un coeficiente de fricción concreto que ayuda a nuestros clientes a acertar con el par de apriete óptimo del tornillo.